Las profecías islámicas están referidas principalmente a la llegada del 12º Imán Mahdi (“El que guía y es bien guiado”), también llamado AL MUNTAZAR (“El Esperado”), que librará la batalla final contra el Anticristo, AL DACHAL.
Según la tradición islámica, el Anticristo es de baja estatura, es ciego de un ojo, tiene la cara rojiza y los cabellos hirsutos; vendrá al mismo tiempo que Al – Madhi. El Santo Profeta Muhammad ha dicho que éste “surgirá cuando el caos esté reinando en el mundo. Distintos países estarán empeñados en ataques nocturnos de unos contra otros. Ni los mayores tendrán misericordia con los más jóvenes ni los fuertes se mostrarán amables con los débiles”.
También está profetizada la Segunda Venida de Cristo, a quien el Islam considera como un gran profeta, que vivirá muchos años en la Tierra y finalmente morirá de muerte natural. Sintéticamente, éstas son algunas de las señales que indicarán la proximidad de LA HORA:
- El conocimiento del Islam será removido, mientras que la ignorancia se incrementará. Esto será debido a que los sabios morirán, y poco a poco menos sabios los reemplazarán.
- El consumo de bebidas alcohólicas y la promiscuidad se incrementarán, como así también el derramamiento de sangre humana.
- Dos países pelearán y se matarán, ambos reclamando la misma causa.
- Se incrementarán los terremotos en número y magnitud.
- Tres lugares en el mundo se hundirán y serán tragados por la tierra: uno en el Oriente, otro en el Poniente, y otro en la península arábiga.
- El Sol saldrá por el Poniente (según algunos exégetas, esta profecía de difícil interpretación se refiere al predominio del Islam sobre Occidente).
- Un fuego saldrá de Adén en Yemen, y se extenderá hacia el norte.
- Aparecerá humo sobre toda la Tierra y provocará a los creyentes un ligero resfriado, mientras que a los incrédulos los enfermará severamente (probable referencia a la Guerra del Golfo y a las armas químicas).
Otra importante fuente de profecías islámicas la constituyen lo HADICES, más de 600.000 sentencias, dichos, leyes y visiones del Santo Profeta, transmitidas oralmente y por escrito de generación en generación a lo largo de los siglos, que explican y complementan El Corán. Muchas de ellas son de una precisión y actualidad escalofriante, como ésta referida al SIDA: “Cuando en una sociedad la conducta sexual ilícita llegue a ser tan cotidiana que no se sienta vergüenza que haga ocultarla y se practique abiertamente, entonces ésta sufrirá una epidemia y unas enfermedades tan dolorosas como nunca habían sufrido sus antepasados”.
Otras profecías de los HADICES están referidas a la aceleración del tiempo: “El tiempo se acortará al grado que un año parecerá un mes, un mes un día y un día una hora. Cuando el tiempo se contraiga, el saber será arrebatado, habrá guerras civiles, la avaricia caerá sobre el corazón de los hombres, y reinará el asesinato...”
Dice el Ayatollah Hubsch en su libro PROFECÍAS DEL ISLAM: “Las profecías del Corán acerca de LA HORA son tan abundantes y tienen una fuerza tan penetrante e irrefutable, que cabe temer que la estupidez de la humanidad acabe por imponerse y que se conduzca a sí misma a la caída”.
Una vez que Al Mahdi haya vencido al Anticristo, el Islam profetiza una época de esplendor, una EDAD DE ORO, que coincide con los “mil años de paz” anunciados en el Apocalipsis de la tradición judeo – cristiana, después de la batalla de Armagedón. Existen numerosos relatos del sistema social que regirá luego del triunfo de Al Mahdi y la restauración del Islam.
Cuando los seguidores de Al Dachal (el Anticristo) hayan sido vencidos, se darán las condiciones para la elevación espiritual de la Humanidad y la expansión del conocimiento, el cual se incrementará en todos los campos. Cuando el pueblo quede bajo la protección de Al Mahdi, las facultades intelectuales florecerán y fructificarán. En este período las masas, hasta entonces subestimadas y dominadas, serán dueñas del poder y la riqueza mundial. De esta forma, la justicia será respetada en todas partes bajo el nuevo sistema:
- Al Mahdí ordenará la justicia. En esta época la injusticia desaparecerá, los derechos serán restablecidos y “los caminos serán seguros”.
- Las bendiciones serán derramadas sobre todo el planeta. La tierra entregará sus mejores dones. Los árboles darán copiosos frutos. La atmósfera de la Tierra será sencilla y fragante.
- Los recursos naturales y minerales serán explotados al máximo; “Dios revelará al hombre los tesoros de la Tierra”.
- Todas las fuerzas naturales serán controladas por el hombre y éste dispondrá de todos los medios para usarlas en su beneficio. La riqueza crecerá de tal forma que ya no habrá más pobres ni necesitados.
- La equidad será observada entre todas las personas. El Imán entregará riquezas en cantidades sin precedentes. En tales circunstancias reinará el orden, la ley y la paz absolutas.
- Nadie perjudicará a nadie. No existirán el temor ni la ansiedad. Hasta los animales salvajes andarán entre los humanos sin dañar a nadie. Ningún grupo buscará dominar a otro. Todos serán conscientes de sus acciones y decisiones.
- Desaparecerá toda debilidad, enfermedad e incapacidad. Todos se recobrarán de sus enfermedades y recuperarán su fortaleza; los ciegos y heridos serán curados.
- Un gobierno mundial, caracterizado por la justicia y la rectitud será establecido, y todos vivirán bajo él en una atmósfera de paz, justicia, prosperidad y amor.
- El Gobierno Divino será instaurado después del fracaso de todos los otros sistemas; aunque de duración limitada, será la última palabra en justicia y rectitud. Luego, será el fin de la Historia...
Dice el Sagrado Corán en la SURA DEL MISERICORDIOSO: “Todo sobre la Tierra pasará; sólo permanecerá la faz de Tu Señor, resplandeciente de majestad y gloria”.
Pero una de las más enigmáticas e inquietantes profecías islámicas la constituye el anuncio de un probable encuentro de la raza humana con seres extraterrestres. En la Sura 42, LA CONSULTA, Aleya 29, leemos:
“Entre sus signos (de Alláh) está la creación de los cielos y la tierra, Y DE TODAS LAS CRIATURAS VIVAS QUE HA DISTRIBUIDO EN AMBOS. ÉL TIENE EL PODER DE REUNIRLOS CUANDO LE AGRADE”.
“Criaturas vivas – dice el Ayatollah Hubsch en su libro PROFECíAS DEL ISLAM – no significa en ningún caso seres espirituales, SINO HUMANOS Y SERES SIMILARES A ELLOS. Cuando Alláh de su autorización, los dos se encontrarán, si bien queda abierta la posibilidad de que el encuentro tenga lugar gracias a la realización de un viaje espacial o por otras vías, como por ejemplo la Telepatía”.
Según la tradición islámica, el Anticristo es de baja estatura, es ciego de un ojo, tiene la cara rojiza y los cabellos hirsutos; vendrá al mismo tiempo que Al – Madhi. El Santo Profeta Muhammad ha dicho que éste “surgirá cuando el caos esté reinando en el mundo. Distintos países estarán empeñados en ataques nocturnos de unos contra otros. Ni los mayores tendrán misericordia con los más jóvenes ni los fuertes se mostrarán amables con los débiles”.
También está profetizada la Segunda Venida de Cristo, a quien el Islam considera como un gran profeta, que vivirá muchos años en la Tierra y finalmente morirá de muerte natural. Sintéticamente, éstas son algunas de las señales que indicarán la proximidad de LA HORA:
- El conocimiento del Islam será removido, mientras que la ignorancia se incrementará. Esto será debido a que los sabios morirán, y poco a poco menos sabios los reemplazarán.
- El consumo de bebidas alcohólicas y la promiscuidad se incrementarán, como así también el derramamiento de sangre humana.
- Dos países pelearán y se matarán, ambos reclamando la misma causa.
- Se incrementarán los terremotos en número y magnitud.
- Tres lugares en el mundo se hundirán y serán tragados por la tierra: uno en el Oriente, otro en el Poniente, y otro en la península arábiga.
- El Sol saldrá por el Poniente (según algunos exégetas, esta profecía de difícil interpretación se refiere al predominio del Islam sobre Occidente).
- Un fuego saldrá de Adén en Yemen, y se extenderá hacia el norte.
- Aparecerá humo sobre toda la Tierra y provocará a los creyentes un ligero resfriado, mientras que a los incrédulos los enfermará severamente (probable referencia a la Guerra del Golfo y a las armas químicas).
Otra importante fuente de profecías islámicas la constituyen lo HADICES, más de 600.000 sentencias, dichos, leyes y visiones del Santo Profeta, transmitidas oralmente y por escrito de generación en generación a lo largo de los siglos, que explican y complementan El Corán. Muchas de ellas son de una precisión y actualidad escalofriante, como ésta referida al SIDA: “Cuando en una sociedad la conducta sexual ilícita llegue a ser tan cotidiana que no se sienta vergüenza que haga ocultarla y se practique abiertamente, entonces ésta sufrirá una epidemia y unas enfermedades tan dolorosas como nunca habían sufrido sus antepasados”.
Otras profecías de los HADICES están referidas a la aceleración del tiempo: “El tiempo se acortará al grado que un año parecerá un mes, un mes un día y un día una hora. Cuando el tiempo se contraiga, el saber será arrebatado, habrá guerras civiles, la avaricia caerá sobre el corazón de los hombres, y reinará el asesinato...”
Dice el Ayatollah Hubsch en su libro PROFECÍAS DEL ISLAM: “Las profecías del Corán acerca de LA HORA son tan abundantes y tienen una fuerza tan penetrante e irrefutable, que cabe temer que la estupidez de la humanidad acabe por imponerse y que se conduzca a sí misma a la caída”.
Una vez que Al Mahdi haya vencido al Anticristo, el Islam profetiza una época de esplendor, una EDAD DE ORO, que coincide con los “mil años de paz” anunciados en el Apocalipsis de la tradición judeo – cristiana, después de la batalla de Armagedón. Existen numerosos relatos del sistema social que regirá luego del triunfo de Al Mahdi y la restauración del Islam.
Cuando los seguidores de Al Dachal (el Anticristo) hayan sido vencidos, se darán las condiciones para la elevación espiritual de la Humanidad y la expansión del conocimiento, el cual se incrementará en todos los campos. Cuando el pueblo quede bajo la protección de Al Mahdi, las facultades intelectuales florecerán y fructificarán. En este período las masas, hasta entonces subestimadas y dominadas, serán dueñas del poder y la riqueza mundial. De esta forma, la justicia será respetada en todas partes bajo el nuevo sistema:
- Al Mahdí ordenará la justicia. En esta época la injusticia desaparecerá, los derechos serán restablecidos y “los caminos serán seguros”.
- Las bendiciones serán derramadas sobre todo el planeta. La tierra entregará sus mejores dones. Los árboles darán copiosos frutos. La atmósfera de la Tierra será sencilla y fragante.
- Los recursos naturales y minerales serán explotados al máximo; “Dios revelará al hombre los tesoros de la Tierra”.
- Todas las fuerzas naturales serán controladas por el hombre y éste dispondrá de todos los medios para usarlas en su beneficio. La riqueza crecerá de tal forma que ya no habrá más pobres ni necesitados.
- La equidad será observada entre todas las personas. El Imán entregará riquezas en cantidades sin precedentes. En tales circunstancias reinará el orden, la ley y la paz absolutas.
- Nadie perjudicará a nadie. No existirán el temor ni la ansiedad. Hasta los animales salvajes andarán entre los humanos sin dañar a nadie. Ningún grupo buscará dominar a otro. Todos serán conscientes de sus acciones y decisiones.
- Desaparecerá toda debilidad, enfermedad e incapacidad. Todos se recobrarán de sus enfermedades y recuperarán su fortaleza; los ciegos y heridos serán curados.
- Un gobierno mundial, caracterizado por la justicia y la rectitud será establecido, y todos vivirán bajo él en una atmósfera de paz, justicia, prosperidad y amor.
- El Gobierno Divino será instaurado después del fracaso de todos los otros sistemas; aunque de duración limitada, será la última palabra en justicia y rectitud. Luego, será el fin de la Historia...
Dice el Sagrado Corán en la SURA DEL MISERICORDIOSO: “Todo sobre la Tierra pasará; sólo permanecerá la faz de Tu Señor, resplandeciente de majestad y gloria”.
Pero una de las más enigmáticas e inquietantes profecías islámicas la constituye el anuncio de un probable encuentro de la raza humana con seres extraterrestres. En la Sura 42, LA CONSULTA, Aleya 29, leemos:
“Entre sus signos (de Alláh) está la creación de los cielos y la tierra, Y DE TODAS LAS CRIATURAS VIVAS QUE HA DISTRIBUIDO EN AMBOS. ÉL TIENE EL PODER DE REUNIRLOS CUANDO LE AGRADE”.
“Criaturas vivas – dice el Ayatollah Hubsch en su libro PROFECíAS DEL ISLAM – no significa en ningún caso seres espirituales, SINO HUMANOS Y SERES SIMILARES A ELLOS. Cuando Alláh de su autorización, los dos se encontrarán, si bien queda abierta la posibilidad de que el encuentro tenga lugar gracias a la realización de un viaje espacial o por otras vías, como por ejemplo la Telepatía”.
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